de encaje de angustia y de tristeza,
que visten mis ojos de pies a la cabeza
como un negro luto en el paisaje.
Quiero un verso que de paz y no medallas;
ponerle fin a esta guerra sin sentido,
en donde solo yo soy mi unico enemigo
y mi corazon es el campo de batalla.
Persigo un verso que no sea fuego sino lumbre,
que no sea ego sino sosiego y desvario,
para que pueda calentarse el que huya del frio
de la rutina, la soledad y la costumbre.
No hay comentarios:
Publicar un comentario